Este fin de semana, la Compañía de Mimos de San Francisco inauguró su quincuagésima primera temporada en el Parque Dolores y los fantasmas regresaron una vez más. “He visto esta 20 veces”, dijo Ripped Van Winkle. “Nunca me he hartado”. Le digo que esta es una nueva obra; la primera vez que se ha representado. “Qué bien”, dice antes de seguir hablando.
A Rip se le puede perdonar que haya creído haber visto antes este espectáculo. La obra de 2010 de la Compañía de Mimos titulada “Posibilidad, or Death of the Worker”, se remonta a sus días de Realismo Socialista cuando en esta obra convocan a los obreros a que se liberen de sus cadenas de conciencia ilusoria y se den cuenta de que no necesitan de sus jefes capitalistas.
En “Posibilidad”, los obreros que cosen etiquetas en ropa de cáñamo orgánico hecha en China toman fortuitamente posesión de la fábrica una vez que los dueños les avisan que el trabajo se enviará al exterior. Resulta ser que uno de los obreros formó parte del movimiento de la Asamblea Popular, el cual se originó inesperadamente como consecuencia del súbito y cercano colapso de la economía y política de Argentina en el año 2001. Una de las tácticas del movimiento fue la ocupación y manejo de las fábricas que el dueño había abandonado o vendido parte por parte.
Lo que comienza con emoción e ingenio vuelve su mirada hacia el sur cuando la acción se transfiere a Argentina. A pesar de las carcajadas del público durante el espectáculo, los segmentos sobre Argentina alentan y desmoronan a la obra entera. La música, con la que a menudo se puede contar para salvar un espectáculo, se escuchaba tan mal que incluso hacía más tediosa la obra. Lo que promete intriga ofrece ambigüedad, y lo que se supone que los obreros estadounidenses deberían aprender de su contraparte en la Argentina nunca se llega a entender, ya que los tejedores de cáñamo ya habían ocupado su lugar de trabajo para cuando escuchan de la experiencia argentina.
La obra compite con las telenovelas melodramáticas y los polémicos juegos de fútbol al compararlos con la tragedia de la vida real que existe en la lucha social. Desafortunadamente, las telenovelas y los juegos de fútbol son mucho más entretenidos. Por ejemplo, la obra nos lleva a través de una serie de reuniones colectivas de obreros que aunque están altamente estilizadas, reflejan a toda costa el tedio que vacía dichos experimentos. Es verdad, pero las buenas anécdotas políticas a veces producen un arte pésimo.
Fue una especie de sorpresa el ver a la Compañía regresar a su antiguo estilo después del éxito que tuvo el año pasado con un género más abierto, divertido y metafórico. Cuando con “Too Big To Fail” parecía haber liberado a los actores al haberse aprovechado de sus talentos y tendencias naturales, “Posibilidad” los limita. Tal vez es sólo cuestión de trabajar más el guión, ya que los actores se veían extrañamente desconectados de lo que estaba sucediendo en el escenario, y mejor ni hablar de lo que sucedió en la Argentina; estaban más preocupados con su pronunciación en Español que con lo que en verdad estaban diciendo (claro que eso se puede considerar como una característica de los argentinos).
El movimiento de la Asamblea Popular en Argentina empezó como un carnaval revolucionario que liberó una gran cantidad de energía social entre los obreros, pero en especial entre los que estaban desempleados y en la juventud de clase obrera. Durante un corto periodo de tiempo y a través de una serie de acciones hablaron sobre el poder en Argentina, su distribución y sus privilegios. La energía de ese momento impulsó a los obreros a que ocuparan las fábricas en la Argentina, pero fue esa energía la que claramente se perdió en el Parque Dolores.
“Posibilidad” tiene posibilidades, pero la Compañía se beneficiaría de un mayor entendimiento sobre el estallido social que hubo en Argentina en el año 2001 y de las consecuencias que éste tuvo. Lo más importante es que (después de todo es una obra), los miembros de la Compañía se tienen que divertir, o al menos pretender hacerlo. El hecho de vivir en la Misión puede que nos facilite vivir mejor que la mayoría en este país, pero incluso aquí se ven las consecuencias del desempleo a largo plazo y el recorte presupuestal a los servicios públicos; no tiene ninguna gracia.
Es por esto que contamos con la Compañía de Mimos para que se organice y nos haga reír. Relájense. Diviértanse. Ya de por sí las cosas están mal como para ir a ver un espectáculo monótono y errante que al único que podría sacarle una risa cínica sería a un poeta argentino ciego, políticamente conservador y que ya está muerto.
Funciones
Hoy: Parque Dolores, 2pm (música a la 1:30)
Próxima función: Glen Park
Sábado 10 de julio a las 2pm (música a la 1:30)
Soap opera and soccer against social struggle. Unfortunately, the former are far more entertaining. Mime Troupe: Have some fun, leave us laughing.